Pasa otra hora, y pasarán más. Yo sigo con los ojos cerrados, pensando en cada unas de las posibilidades que no he vivido y que podrían haber sido. Pienso en cada conversación que he tenido, en esas palabras de las que me arrepiento y de aquellas de las que alguna vez me he vanagloriado.

Cojo aire. Lo expulso. Noto tu aliento. Se que estás cerca de mi. Nos separa la fracción de un segundo. Pero ...hace tanto tiempo que es esa la distancia que nos separa.

Digo una palabra, es casi un susurro. Tu sonríes. Lo noto. Eso me alivia. Temo al error. Porque si fallo, no podré tener nuevas posibilidades.  Esto no es como mi mente. Eso me asusta. Dudo ahora que te he dicho.

Dices una palabra, es casi un suspiro. No la he oído, pero he notado tu aliento en mis labios, tu voz en mi pecho. Sonrío, lo notas. Pareces aliviada. Entiendo muchas cosas ahora.

Abro los ojos. Tu estás quieta, estás callada¿Pensando en cada una de las posibilidades que has vivido y en aquellas que nunca han sido?

Abres los ojos. Te beso. Me besas.La fracción de un segundo. La fracción de un segundo que dura horas.

¿Qué buscas, te pregunto?

A ti, me dices.Sonríes.

¿Y tú? Preguntas.

Sonrío. Y nunca te respondo.

Día a día.

Y hay dolores en la carne, invierno en el corazón, el alma abandonada muere por despecho, en ella hay algo que no se borra, no que no se nota, algo que ya forma parte de si misma como su pura esencia, algo a lo que nadie ha dado nombre aún. Y con ello se vive, con ese compañero de travesía forzado, en marchas por un camino que aún no existe. Y como cada mañana, abres los ojos.

Miras a tu alrededor. Copas vacías, sábanas enredadas, un cuerpo fino a tu lado. Un cuerpo que no debe ser mirado, porque ya no es su tiempo. Pero lo miras. No es como era anoche. Anoche ella era el aroma del lirio, pero se dejó mancillar,por ello lloraste. Ella fue durante un momento el aroma a lilas y grosellas que tanto anhelas, pero no fue eso más que un recuerdo muerto... y es que ella no era más que el aroma a jazmín y a verbena... y eso no es lo que buscas.

Por primera vez en el día tragas saliva. Tus labios, resecos, mantienen mejor el día anterior que tu memoria. Has olvidado porque debías olvidar¿No es eso? No preguntes. No preguntes, porque podrías obtener respuesta.

Te cubres, sólo ligeramente, sólo por sistema. Te levantas, buscas el agua, que borre esa carcoma de tu voluntad. Sabes que esa carcoma sólo se borra con fuego.

El agua cae por tus hombros, es agradable, el contraste entre el frío y el calor. El olor a menta, a melocotón. Frotas, no debe haber rastro de ella, no debe de haber rastro de ti.

El espejo empañado distorsiona tu figura. Cierra los ojos, coges aire, esperas. Durante unos segundos la única sensación que llena tu cuerpo es el lento pasear de las gotas por tu cuerpo. Reúnes valor, abres los ojos. Te ríes ¿Esa?¿Es esa realmente la visión que todos ven? Ese ser enfermo e infecto... que ha nacido cuando no debería, donde no debería...Tu risa se apaga. Esa, esa es la visión que todos ven. Esa es la visión de la belleza.

Vuelves, en la cama no hay nada esperándote. Sólo el mismo cuerpo de porcelana. Te vistes, tienes hambre.
Te arreglas,  más o menos y echas un último vistazo a tu compañía nocturna, que a pesar de que no intentas ser sigiloso ni mucho menos, aún duerme,y con una medía sonrisa, entre alegre y melancólica te acercas a su cama, donde sin saber porque , incómodo, la tapas con la suave sábana de seda.


Dudas un momento pero finalmente ,acercas tus labios a los de ella, a los de todas, pero nunca, jamás los juntas definitivamente, solo cierras los párpados y suspiras.

Sales por la puerta y piensas que esos dos que ayer se amaron, jamás volverán a verse.

Inocencia.





Yo, siempre he visto a ``ella`` como algo perfecto, a algo ideal, tan sumamente bueno y delicado, suave, tierno y libre que siempre supe que difícilmente la tendría eternamente, y es extraño, yo nací junto a ``ella``, yo crecí junto a ``ella``, pero un día, sin saber ni como ni porque, ``ella`` se fue, me dejo solo, corto la venda que había sobre mis ojos que hacía que mi mundo y mi realidad tuvieran sentido.

``Ella`` es la mentira más bella, la caricia más reconfortante , la manta más protectora , y también, la que más daño hace.

``Ella`` era el sentido de mi vida, ahora es sólo vergüenza y sentimientos escondidos, por el tiempo robados, causante de mis desilusiones y lágrimas, quien te ha llevado, que te devuelva, yo…y ahora más que nunca, cuando ya me he dado cuenta de tu completa ausencia, te necesito.


-Eres una niña hermosa, pero la hermosura no dura para siempre en este mundo, ven conmigo, donde yo puedo alojarte, nada puede hacerte daño.

-Es que… él me ha dicho, que nada de lo que tu dices es verdad, que yo debo de estar a su lado, y no al tuyo.

-¿Por qué crees que él tiene más razón que yo? Porque yo te miento y él te dice la verdad ¿Eh? Ambos podemos ser los mentirosos, pequeña niña.

-No, él no miente.

-¿Por qué?

-Porque le conocí primero, y me salvo.

-…….¿Y? ¿Le conociste primero, que criterio es ese?

-Es el destino.

-¿Crees en el destino? Pobre inocente….

- Seré inocente, pero soy feliz así.

-Bueno….dejemos estos temas de conversación, juguemos, he traído muñecas.

-Tampoco soy tonta…

-¿Cómo dices?

-Tu no quieres jugar a las muñecas a mi lado, quieres que yo sea tu muñeca, me lo ha dicho él.

-De nuevo su él….¿Qué más te ha dicho?

-Que eres una cáscara vacía, que realmente, es triste tu historia, que no elegiste ser así, que no quieres seguir viva.

-¿Qué no quiero seguir viva?…que tontería…

-Eso ha dicho él, no tienes nada, tampoco el deseo de vivir, porque estás vacía, al igual que tus palabras y tus sonrisas.

- Por eso es una tontería….

-Oh… no entiendo…

-No tengo el deseo de vivir, no tengo nada, no tengo vida, lo único que tengo, es existencia, por llamarlo de alguna manera, aunque tampoco es así, porque no tengo nada, una cáscara vacía, como has dicho, tengo mi cáscara,  pero como es lo único que tengo, quiero conservarla.

-Entiendo…. No me pareces mala….

- Es que no soy mala, tampoco puedo serlo.

-¿Por qué sigues existiendo?

-Porque… porque si, no hay motivo alguno fuera de ese, existo, porque si, sigo existiendo, porque si.

-Vaya… eso es triste.

-¿Lo es? Puede ser, si.¿Por qué vives tú?

-Porque, es divertido, me gusta jugar, comer hasta hartarme, saltar con mis botas en la lluvia, tomarme un buen vasito de leche antes de irme a dormir, todas esas cosas, me gustan.

-No entiendo el porque.

-Porque esas cosas….llenan mi vacío…

-¿Te gustaría vivir completamente sola?

- No, claro que no… a ti supongo que no te gusta.

-No vivo sola, y no creo que me importara.

-¿Con quien vives entonces?

-Con las máscaras vacías que han caído entre mis sogas y han sido arrastradas al abismo.

-Eso… son… personas vacías.

-Son como yo, ellos máscara en parte, y yo cáscara entera, pero nada diferencia realmente unos de otros.

-¿Por qué tu entonces, tienes la voluntad de traer a nuevas personas para volverlas seres vacíos?

-Yo no tengo esa voluntad, a mi me lo mandaron, y yo lo hice.

-¿Quién?

-El mundo, quiere que de una vez, se callen los humanos, son una raza ruidosa, y muy molesta, están matando lo bello que la vida ha hecho.

-Somos malos los humanos entonces, tu eres la buena.

-No, hay humanos buenos.

-¿Ninguno de los que han caído en tu abismo eran buenos?

-En mi abismo, no caen ni buenos ni malos, yo no puedo convertir a la gente en máscara, sólo ponerles una que ellos mismos han hecho, la gente vacía, no se opone a mi, y cae entre mis redes, pero ya vienen vacíos, yo no les hago nada, salvo darles un lugar donde estar, donde sufrir sus propios lamentos y un lugar donde compadecerse de si mismo.

-¿Yo… acabaré así…?

-Si quieres venir a mi reino, si, sino, seguiras como hasta ahora, quizás sola, porque no hay nadie con quien jugar en este mundo, porque todos están conmigo, o casi todos, y algún día, yo seré todo, en mi abismo yo, y fuera de él, sólo tu, así que vendrás conmigo, porque no te quedara remedio.

-Eso no es así.

-¿Cómo dices?

-No voy a estar sola, voy a estar con él.

-Cuando él vea que su voluntad no puede con el vacío, caerá dentro de este.

-No, él te ganara, porque aunque sea como una pequeña gota de agua en el universo, será algo, y tu, ya no estarás vacía. Para ganarle, tienes que quitárselo todo, para que él te gane, sólo tiene que darte algo.

-Cuando me gane ¿Qué hará? No tendrá por lo que vivir.

-Yo seré su razón de vivir.

-Si tu felicidad, si tu razón de vivir es una persona, acabaras siendo infeliz.

-Bueno, él ahora es feliz y su razón de vivir, es una persona.

-¿Quién?

-Tú.

-Oh…

-¿Qué pasa?

-Gracias…

-¿Por qué?

-Por considerarme una persona.

-De nada….¿Jugamos?

-¿No decías que no confiabas en mi?

-Ahora ya lo hago.

-Gracias….

-No pasa nada, disfrutemos de la compañía mutua.

-¿Sabes pequeña?

-¿Qué?

-Espero que él me gane.

-¿Por qué?

-Me gustaría, por un momento, sentir la semilla de su voluntad en mi, y por primera vez en mi vida, dejar de sentirme vacía.

- Juguemos…

-Es cierto… juguemos… he traído muñecas.

Dedicado a ti, mi niña.

La flor sin espinas …

Has crecido en el jardín de la desolación, entre tanta mala hierba , entre tanto odio.

Has sorteado su veneno, esquivado su muerte, ha luchado y ha perdido, pero jamás ha conocido la rendición.

Has tenido entre tus brazos a la felicidad y a la desdicha, has llorado mientras reías, a reído mientras llorabas.

Has mantenido tu color fuerte y vivo en tus pétalos, aunque se pudrieran por dentro.

Has volado , soñando que tus raíces han echado alas y te han alejado del dolor.

Has conocido el más puro abismo de la soledad, y la más dulce compañía.

Has construido una cáscara para sus semillas, porque ha nacido mi flor, mi pobre muchacha, sin espinas.

Has vivido muchas cosas… pero ahora, has de olvidarlas todas, porque entre mis brazos, tú, sólo eres mi niña.




El tema del que convenía ``hablar`` hoy era el de los pequeños placeres de la vida y no otro tema que se me podría haber presentado, pero para ser sinceros, no sabía , no tenía ni la más mínima idea de que decir al respecto, hasta que me paré un segundo a pensar ¿Qué son para mi los pequeños placeres de la vida? 

Y no son otra cosa más que la felicidad.

Pensé ahora de forma inevitable en que cuando era pequeño, aunque con el simple hecho de despellejarme las rodillas podía hacer que yo viera al Apocalipsis rondando mi vida, mi madre simplemente me abrazaba y decía aquello de  ``Sana sana , culito de rana, sino sana hoy, sanará mañana`` Y ya estaba, un cola cao para reponer energías perdidas y de nuevo con la felicidad necesaria para combatir al mismísimo mundo.

A esa edad, ciertamente, había placeres de los que no podía disfrutar, o a los que no calificaba como placeres, sino como aburrimiento, y no me refiero al sexo o a la lujuria, el vicio y demás, en esos días el simple hecho de hablar con un amigo durante horas, cosa que ahora me hace tremendamente feliz, me parecía la mayor de las abominaciones si no hablábamos sobre bola de dragón o sobre la increíble capacidad supuesta de nuestros padres de vencer al resto del universo conocido de un solo puñetazo, menos claro está a nuestros personajes de bola de dragón, porque la vida era así.

¿Y es que ahora no puedo tomar un cola cao? ¿No puedo ahora comprar miles de chicles, metérmelos en la boca y hacer una pompa de tamaño colosal? ¿Es que no puedo ser feliz simplemente con que me digan una cancioncilla infantil?

Si no me equivoco, cada vez puedo hacer más cosas, y no al contrario, no por poder ahora disfrutar de una charla o de placeres más carnales como el sexo o cierto tipo de licores no voy a poder ponerme unas botas de agua y empaparme hasta las ideas, aunque en vez de recibir una regañina de mi madre y un azote con disgusto momentáneo(Sólo hasta que ella se reía y me daba un besito de esquimal) ahora entre en casa y quizás piensen que estoy un poco loco.

Pero eso a los que algunos llaman locura yo lo llamo felicidad, y es que la vergüenza a veces nos impide ser felices, no se que hay de bueno en conservar una ``digna`` imagen y ser infeliz a parecer un loco que tiene una sonrisa de oreja a oreja.

¿Sabes por que el serio es infeliz y yo puedo decir orgullosamente cuando me preguntan a qué tal estoy mi típica respuesta de ``Siempre bien``?

Es porque el serio, quiere un Ferrari, millones en su cuenta corriente y un palacio en un país exótico. O aunque no sea algo tan material, quiere ser el mejor en todo, el más listo el más guapo el mejor, el que más amigos tiene, el que más gente le quiere, el perfecto, el que cree que si sus sueños no se alcanzan, pasan a ser espinas y no flores, que es lo que son para mi, porque si consigo mis sueños, mi vida estará vacía.

¿Saben que pido yo a la vida para ser feliz?

Un abrazo, una pompa de chicles, unas katiuskas para la lluvia y un cola cao para el frío.

Si esto no me hace feliz, si algún día me caigo y creo que no me puedo levantar, que cualquier dolor que me venga puede conmigo y que esa herida jamás sanará, no se preocupen por mi, señores y señoras de infinita seriedad.

A mi aún me queda mi ``Sana sana…``


Pecado/Redención/Camino.

Una vez probado el fruto amargo, una vez te hace cautivo la sensación del néctar al rozar tus labios, es difícil la vida pura y ajena a él, la vida sin pecado y sin necesidad de redención.

Pero que hacer si cada semilla sembrada dará lugar a árbol amargo de fruto amargo, que hacer si la garganta sin ese néctar se te seca, si no hay arrepentimiento hasta la plegaria tardía entre las sábanas extendidas de nuestro verdugo.

Y en el angosto desierto de la vida y las emociones se nos aleja quizá el pecado de las carnes pero a nuestro alma acude.

Y es vida lejana la vivida y es soñada la esperanza.

Encuentras entre la nada el dilema sin solución, el que hace que la tentación germine y de paso a la flor de nuestra corrupción, con un pétalo por cada pecado en la infinidad de estos.

Por esto, tanto me pregunto como tanto me cuestiono, tanta duda y tanta indecisión sumen en estado penoso y lastimero al corazón, con el fin siempre lejano de toda duda de que al termina abrazaremos a la perdición.

Pero palabras como estas son como trucos de prestidigitador, que mantienen el pensamiento apartado del camino, engañándonos con falsos desvíos.

Porque no hay desvíos en el camino del vivir, cada paso es un paso más cerca del final, pero es a la vez un abismo respecto al paso anterior, cada decisión, cada nuevo pétalo que sumamos a nuestra gama de expiación, es la decisión correcta, el camino correcto.

Porque no existe camino por delante de nosotros, no existen pasos posibles, sólo huellas atrás, huellas que una vez hechas, no se irán...

...jamás.

El hombre de alabastro.




Sentía el calor en la piel mojada, como los dedos de ella resbalaban por su piel, esa dirección clara que estaba tomando ese encuentro, le agradaba.

Había habido un beso hacía poco tiempo, aún sentía el sabor de ella en su boca, un tono dulzón difícil de definir, porque no se parecía a nada de este mundo. Pero tampoco iba a intentar explicárselo a nadie.

Cerró los ojos, dejó que su aroma se mezclara con el aire, que llegara hasta él, un aroma suave, a melocotón. No sabía como era posible, pero siempre tenía ese olor, como si ella misma fuera la que lo desprendiera y no una fragancia barata que podría usar cualquiera. Pero eso lo sabía él, que ella no era cualquiera.

Sintió sobre sus labios los de ella, él los entreabrió, invitó a pasar a su lengua, a esa sensación nueva pero ya vivida, y a cada momento más deseada. Si él pudiera desear algo.

Llego otro roce, paseaba por sus hombros las yemas de sus dedos, con un ardiente deseo que casi había derretido la habitación de hielo en la que se encontraban. Y como una chispa prende ante la yesca y el pedernal, él se encendió.

Y todo fue distinto a todo, ella había gastado todo su fuego para derretir ese hielo que ella creía que era el corazón de él, ese último resquicio desconocido para ella. Pobre inocente, que confunde las estrellas con su  reflejo en el lago una noche de verano.

Pero eso no le importaba, porque no tenía porque hacerlo. Porque aquel era momento para el goce.

Escuchaba gemidos a su lado, la contracción de los músculos de ambos. Podría notar el olor a melocotón mezclado con el del sudor, la fragancia de la pasión, el sabor de su cuerpo y esa electrizante sensación que sentía cada vez que recorría con sus manos los trazos mal dibujados por la noche de el cuerpo de ella. Y hubo más sensaciones, toda una sinfonía de ellas, porque ellos sabían tocar todos los acordes del placer.

Pero el placer no dura para siempre.

Y ella intentó llegar más allá. Intentó derretir el corazón de él, esa capa externa de hielo que ella siempre había sabido que él tenía. Esa única capa que hacía que él no la amara.

Pero esa capa no existía, porque él no tenía ninguna capa, porque él no tenía ninguna coraza de hielo sobre su  corazón, porque no la necesitaba.

Porque su propio corazón era de alabastro, algo que no podría ser fundido, un material que acepta el calor con facilidad, pero que lo roba, simplemente lo hace desaparecer, corresponde con calor al frío, tan ardiente es la energía que recibe a veces que entre su lisa superficie puede notarse un ligero ardor, que duraba poco tiempo.Alabastro. El material del que está hecho él, por eso no se derretirá, pese a todo el calor que le habían dado.

Pase lo que pase, devolverá calor al calor, frío al frío. Pero nada cambiará.

Porque él no necesita un cambio.

Y la habitación es hielo de nuevo, formada por figuras de forma humana, por gente que no es cualquiera, también por ella.

Se acaricia la piel, le ha parecido sentir un último suspiro de calor, de pasión, pero todo ha pasado.

Ahora sólo puede esperar, a que alguien abra esa habitación de nuevo, condenado a cometer de nuevo el error y pecado de intentar cambiar lo que no necesita cambio.

Y él aceptará ese calor, lo robará, para sentir por unos momentos algo más que el viento gélido de sus entrañas.

Y él esperará todo el tiempo que viva. Esperando a que alguien se de cuenta de que al alabastro no se le marca con fuego, sino con cincel y hierro.

Realidad por ficción.



Dedicar tu vida a encontrar el propósito de esta es una tontería, eso es evidente. Pero vivir la vida sin más, sin fijación ni orden ninguno, dejándose llevar por la sensación del momento llevará a la nada y al absurdo.

La vida es única, sólo disponemos de una posibilidad para cada opción de nuestra vida, y la gran opción es que hacer con nuestra vida, como dirigirla y con que intención vivir esta.

Pero eso es una pregunta imposible, porque toda elección es vana, porque en eso, todo es inútil. Porque no somos capaces de vivir todo lo que queremos, porque queremos castillos en el aire. Porque aún teniendo estos castillos, miraríamos al cielo, a las infinitas estrellas y no sabríamos cual de ellas es la nuestra.

Y no hay solución para esto...

Algunos si que tienen esa clave, porque alguien se la da, alguien, una deidad, un ser superior, como quiera ser llamado. Pero ese ser superior no habla nuestro idioma, ese ser superior no nos dice nada. Porque no puede, porque no existe. Y muchos echarán toda su vida buscándole, para que él les diga su propósito y su intención, pero es como buscar atrapar la niebla entre tus manos.

Pero ese ser...podría darnos la respuesta a todo anhelo...pero no existe...

¿Qué hacer?

Por muy absurda que parezca la idea, se debe crear a Dios, para que este sepa que hay que hacer.

El nuevo enfoque es.

¿Cómo crear algo tan imposible?

La razón, es mi respuesta. Algún día, espero encuentres la tuya.